EXAMEN DE LOS INFORMES PRESENTADOS POR LOS ESTADOS PARTES
DE CONFORMIDAD CON EL ARTICULO 9 DE LA CONVENCIÓN
Observaciones finales del Comité para la Eliminación de
la Discriminación Racial
Bosnia y Herzegovina
El Comité examinó el informe de la República de Bosnia
y Herzegovina (CERD/C/247/Add.1) en sus sesiones 1082ª y 1092ª, celebradas
el 7 y el 14 de marzo de 1995 (CERD/C/SR.1082 y 1092).
En su 1082ª sesión el Comité procedió al examen en
ausencia de un representante del Estado Parte. Los miembros señalaron
aspectos de la situación imperante en Bosnia y Herzegovina, destacando
los efectos del conflicto actual y las actividades de los órganos internacionales.
Algunos miembros instaron al levantamiento del embargo internacional sobre la
exportación de armas al Estado Parte, al retiro de la Fuerza de Protección
de las Naciones Unidas y a una acción más enérgica del
Consejo de Seguridad. Esas sugerencias ocasionaron un debate.
Una delegación del Estado Parte asistió a la 1092ª sesión
del Comité. El representante del Estado lamentó el envío
tardío del informe y el hecho de que, con motivo de la guerra, los representantes
no hubieran podido asistir a sesiones anteriores en que se había examinado
la situación del país.
El representante señaló la creación de la Federación
de Bosnia y Herzegovina y las disposiciones muy categóricas en materia
de derechos humanos que contenía su Constitución, incluida la
disposición de incorporar la Convención y otros instrumentos internacionales
en la legislación de la Federación. El representante también
explicó el mandato que se pensaba dar al defensor del pueblo y al Tribunal
de Derechos Humanos. Expresó el apoyo de su Gobierno al imperio del derecho
y a procedimientos internacionales como los del Tribunal Internacional para
el enjuiciamiento de los crímenes de guerra en la ex Yugoslavia.
El representante describió la pavorosa situación que afectaba
al país como consecuencia de la agresión de fuerzas secesionistas
y externas: el Gobierno no controlaba todo su territorio y no estaba en condiciones
de poner fin a las violaciones de los derechos humanos en gran escala que se
producían en esas zonas.
Los miembros del Comité expresaron su agradecimiento por la presencia
de una delegación de alto nivel del Estado Parte y la información
proporcionada verbalmente y en el informe. Se dijo que se entendía que
las grandes dificultades que planteaban la guerra y el sitio de Sarajevo impedían
al Estado Parte cumplir las obligaciones que le imponía la Convención
en lo atinente a la presentación de informes.
Varios miembros pidieron más información sobre las estructuras
jurídicas establecidas en las Constituciones de la República y
de la Federación que servían para proteger y reivindicar los derechos
humanos, por ejemplo el sistema judicial, incluido el Tribunal de Derechos Humanos
que se pensaba crear, y los procedimientos para juzgar los crímenes de
lesa humanidad, en el país o ante el Tribunal Internacional. También
se pidió al representante que señalara en qué medida se
estaban investigando y juzgando los delitos de carácter étnico
y otros análogos.
En cuanto a la guerra en curso, los miembros pidieron al Gobierno que expresara
su opinión sobre las ambiciones políticas a largo plazo de los
separatistas y el juicio que le merecía la eficacia y utilidad de la
Fuerza de Protección de las Naciones Unidas. Un miembro también
preguntó al representante si consideraba que el conflicto tenía
esencialmente motivaciones étnicas o políticas.
Los miembros preguntaron si Bosnia y Herzegovina seguía siendo un Estado
pluralista que rechazaba la discriminación o el favoritismo étnicos.
Un miembro preguntó si los no musulmanes recibían el mismo trato
que los musulmanes. Se pidió más información sobre la influencia
de los medios de comunicación y se preguntó si habían contribuido
a promover el odio entre las etnias.
Respondiendo a las diversas preguntas planteadas, el representante del Estado
Parte reiteró la adhesión de su Gobierno al imperio del derecho
y la importancia que atribuía a las normas de derechos humanos. Subrayó
la culpabilidad de los agresores, que intentaban desmembrar su país.
Él y otros miembros de la delegación presentaron sus análisis
de los intentos de crear una "Gran Serbia".
Se reconoció la importante función de la Fuerza de Protección
de las Naciones Unidas, aunque los representantes dijeron que era insuficiente
para atender a las necesidades existentes.
Observaciones finales
El Comité aprobó las siguientes observaciones finales en su 1097ª
sesión, celebrada el 16 de marzo de 1995.
a) Introducción
El Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial
agradece el informe recibido del Gobierno de la República de Bosnia y
Herzegovina y expresa su profunda consternación por las violaciones de
los derechos humanos y del derecho internacional humanitario de que da cuenta
ese informe. El Comité agradece la presencia de los representantes del
Gobierno de la República de Bosnia y Herzegovina y toma nota con reconocimiento
de la información suministrada verbalmente.
b) Principales motivos de inquietud
El Comité expresa su grave preocupación y condena las violaciones
masivas, abiertas y sistemáticas de los derechos humanos ocurridas en
el territorio de Bosnia y Herzegovina, en su mayor parte en relación
con la política sistemática de "depuración étnica"
y los actos de genocidio cometidos en las zonas bajo control de las autoproclamadas
autoridades serbias bosnias. Esas prácticas, que siguen ocurriendo, constituyen
una violación grave de todos los principios básicos inherentes
a la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación
Racial. El Comité insta a que se eliminen de inmediato las consecuencias
de la depuración étnica, comenzando por el retorno voluntario
de los desplazados.
El Comité lamenta profundamente que no se haya brindado ninguna protección
eficaz a la población, ni aun en las zonas declaradas "zonas seguras"
por el Consejo de Seguridad.
El Comité lamenta profundamente que, por el hecho de que ciertas partes
de su territorio se encuentren bajo el control de fuerzas secesionistas apoyadas
desde el exterior, el Estado Parte no esté en condiciones de ejercer
control sobre la totalidad de su territorio y, en consecuencia, no pueda asegurar
la aplicación de las disposiciones de la Convención en todo el
país. Se hace notar que esas fuerzas secesionistas son las principales
responsables de las violaciones sistemáticas de los derechos humanos
en las zonas sometidas a su control de facto, incluidos los derechos garantizados
por la Convención, cuyas principales víctimas son los miembros
de la comunidad musulmana. El Comité, consciente del derecho de legítima
defensa de todos los Estados, reconocido en el Artículo 51 de la Carta
de las Naciones Unidas, observa que se ha impedido al Gobierno proteger los
derechos humanos en la totalidad de su territorio.
El Comité está profundamente preocupado por la amenaza a la integridad
territorial de la República de Bosnia y Herzegovina que representa el
proyecto de una "Gran Serbia".
c) Sugerencias y recomendaciones
El Comité reafirma que las personas responsables de violaciones masivas,
abiertas y sistemáticas de los derechos humanos así como de crímenes
contra el derecho internacional humanitario deben rendir cuentas y ser enjuiciadas
en el plano nacional o internacional.
Si bien tiene presente la complejidad de una acción coercitiva, conforme
a lo señalado por el Secretario General de las Naciones Unidas en el
suplemento de "Un programa de paz" (A/50/60-S/1995/1), el Comité
opina que las violaciones continuadas y reiteradas de los principios básicos
del derecho internacional y de las obligaciones internacionales dimanantes de
esos principios, incluidos los principios básicos inherentes a la Convención
Internacional sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación
Racial, exigen la aplicación por el Consejo de Seguridad de medidas coercitivas
en relación con la situación en Bosnia y Herzegovina.
El Comité reitera su ofrecimiento de asistencia técnica al Estado
Parte, en la forma de una misión integrada por uno o más de sus
miembros, con miras a promover la eliminación de todas las formas de
discriminación racial.