Comunicación Nº 947/2000 : Australia. 27/10/2000.
CCPR/C/70/D/947/2000. (Jurisprudence)
Convention Abbreviation: CCPR
Comité de Derechos Humanos
70º período de sesiones
16 de octubre a 3 de noviembre de 2000
Anexo*
Decisión del Comité de Derechos Humanos emitida
a tenor del Protocolo Facultativodel Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos
70º período de sesiones
Comunicación Nº 947/2000
Presentada por: Sr. Barry Hart
Presunta víctima: El autor
Estado Parte: Australia
Fecha de la comunicación: 31 de enero de 2000 (comunicación inicial)
El Comité de Derechos Humanos, creado en virtud del artículo 28
del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos,
Reunido el 25 de octubre de 2000,
Adopta la siguiente:
Decisión sobre admisibilidad
1. El autor de la comunicación es Barry Hart, ciudadano australiano,
nacido el 20 de agosto de 1935. Afirma ser víctima de violaciones por
Australia de los párrafos 1 y 2 y del inciso a) del párrafo 3
del artículo 2, del artículo 14, de los párrafos 1 y 2
del artículo 17, del párrafo 1 del artículo 18, de los
párrafos 1 y 2 del artículo 19 y del artículo 26 del Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos. El Pacto Internacional
de Derechos Civiles y Políticos entró en vigor en el Estado Parte
el 12 de noviembre de 1980 y el Protocolo Facultativo entró en vigor
el 25 de diciembre de 1991.
Los hechos expuestos por el autor
2.1. En 1973 el autor acudió voluntariamente al hospital privado de Chelmsford
a una cita psiquiátrica con el Dr. Herron, destacado especialista de
la cura de sueño profundo de ese nosocomio. El autor afirma que el personal
de Chelmsford lo dejó inconsciente involuntariamente. Durante los diez
días siguientes el autor afirma que fue sometido sin su consentimiento
a un tratamiento con grandes cantidades de fármacos potencialmente tóxicos,
de administración por vía nasal (incluidos barbitúricos).
También se le sometió a una terapia electroconvulsiva sin relajantes.
Como consecuencia de estos tratamientos el autor sufrió una neumonía
doble, pleuresía, trombosis venosa profunda, embolia pulmonar y una lesión
cerebral anóxica. El 20 de marzo de 1973 el autor fue trasladado con
neumonía bilateral y una embolia pulmonar al Hornsby Public Hospital,
de donde se le dio de alta el 3 de abril de 1973. Después de que se le
diera de alta, el autor sufrió de convulsiones, sensibilidad al ruido,
sobresaltos, pesadillas, náuseas y un estado de excitación psicológica
permanente. Se le diagnosticó un estado de estrés postraumático
crónico grave. Se afirma que como consecuencia de estos efectos el autor
no puede emplearse, y que ahora depende de una pensión de invalidez.
El autor alega que en los últimos años estos síntomas se
han ido exacerbando, al punto de que ahora ya son intratables.
2.2. En noviembre de 1976 el autor entabló acción judicial, exponiendo
sus reclamaciones ante el Tribunal de Distrito de Nueva Gales del Sur. En 1979
el caso fue elevado al Tribunal Supremo de Nueva Gales del Sur.
2.3. En marzo de 1980 se inició un procedimiento civil contra Chelmsford
y el Dr. Herron ante el juez Fisher y un jurado en el Tribunal Supremo de Nueva
Gales del Sur. El autor alega que en la audiencia no se observaron las debidas
garantías en varios respectos. Se dice que el juez excluyó importantes
pruebas por considerarlas parciales, y se sometió al jurado a presión
indebida para que llegase rápidamente a una conclusión. Los acusados
no presentaron testigo médico alguno para defender su posición,
pero el juez se refirió al testimonio pericial médico ante el
jurado en términos desfavorables para el denunciante. El autor afirma
que el síndrome de estrés postraumático de que sufría
no era una enfermedad reconocida a la sazón. El juez encargado del juicio
ordenó al jurado que no tuviesen en cuenta cualesquiera daños
ejemplares (punitivos), aduciendo que no había prueba alguna de negligencia
profesional manifiesta o insensible que los justificara. El 14 de julio de 1980
el jurado pronunció un veredicto contrario a Chelmsford y al Dr. Herron,
por detención ilegal y por agresión física y negligencia,
respectivamente. Se otorgó al autor una indemnización de 6.000
dólares por detención ilegal contra ambos acusados, 18.000 dólares
por agresión física contra el Dr. Herron y 36.000 dólares
de indemnización compensatoria (por lucro cesante pasado y futuro) contra
ambos acusados. En agosto de 1980 los acusados apelaron de daños y perjuicios
"excesivos", y, por su parte, el autor también apeló
de la cuantificación así como de la exclusión de los daños
ejemplares.
2.4. En 1983 el autor se quejó ante el Comité de Investigaciones
de la Junta Médica del tratamiento a que fue sometido en Chelmsford y
de cuestiones conexas derivadas del juicio de 1980.
2.5. En marzo de 1986 el Comité de Investigaciones determinó que
existía una presunción de conducta profesional indebida por parte
del Dr. Herron que justificaba la remisión del caso a un Tribunal Disciplinario.
El Dr. Herron interpuso una demanda de abuso procesal ante el Tribunal de Apelación
de Nueva Gales del Sur, que remitió el asunto al Tribunal Disciplinario.
En junio de 1986 el juez Ward del Tribunal sostuvo que no había habido
dilación alguna por parte del autor que constituyese un caso de abuso
procesal, remitiéndose a todas las actuaciones judiciales realizadas
durante ese período.
2.6. En septiembre de 1986, a solicitud del Dr. Herron, el Tribunal de Apelación
de Nueva Gales del Sur (McHugh CJ, Priestley y Street JJA) suspendió
permanentemente el proceso disciplinario, independientemente de la decisión
del juez Ward, sobre la base de que el autor había abusado del proceso
al retardar por espacio de tres años una queja ante el Comité
de Investigaciones de la Junta Médica. En diciembre de 1986 el Tribunal
Supremo de Australia se negó a otorgar al autor permiso especial para
apelar del fallo del Tribunal de Apelación.
2.7. En agosto de 1988 se encargó a una Real Comisión de Investigaciones
que investigara el ejercicio de la profesión médica en Chelmsford,
incluida la terapia de sueño profundo y el gran número de muertes
ocurridas en ese centro. La Real Comisión examinó exhaustivamente
el caso del autor, entre otros. En un informe muy crítico de diciembre
de 1990 la Comisión estimó que había habido conducta dolosa
y que existían pruebas de grave perjuicio psicológico. Determinó
que los acusados habían conspirado para falsear la justicia, entre otras
cosas, amenazando a una enfermera testigo ocular, falsificando el presunto consentimiento
del autor al tratamiento, y mintiendo luego deliberadamente respecto del incidente
de falsificación.
2.8. El autor afirma que en 1993 se le diagnosticó por primera vez una
enfermedad psiquiátrica debilitante. En junio de 1993 el Tribunal de
Apelación de Nueva Gales del Sur rechazó la solicitud del Dr.
Herron de que se desestimara la apelación del autor del fallo de 1980
por falta de acusación.
2.9. En agosto de 1995 el Tribunal de Apelación de Nueva Gales del Sur
atendió la apelación del autor del fallo de 1980, en relación
con la cuantificación inadecuada de la indemnización compensatoria
y la orden del juez de que el jurado excluyese cualesquiera daños ejemplares.
No se insistió en la apelación del Dr. Herron. El 6 de junio de
1996 el Tribunal de Apelación de Nueva Gales del Sur (Priestley, Clarke
y Sheller JJA) desestimó la apelación, imputando las costas al
autor. El Tribunal determinó, entre otras cosas, que los informes sobre
las pruebas psicológicas realizadas en 1972 revelaban "muchos de
los síntomas" atribuidos posteriormente al tratamiento aplicado
en Chelmsford. El Tribunal estimó que las conclusiones de la Real Comisión
de Investigaciones, amén de otras pruebas, sólo apoyaban la conclusión
de que el Dr. Herron había "actuado equívocamente" en
concierto con otros. En una comunicación dirigida al Tribunal, Priestley
JA señaló que "a mi parecer los nuevos elementos de juicio
aducidos por el solicitante no habrían contribuido en nada a los elementos
de que ya se disponía en el juicio". El Tribunal sostuvo que no
podía encontrar falta alguna en la conducta del juez encargado del juicio.
2.10. En abril de 1997 el Tribunal Supremo de Australia rechazó una solicitud
de permiso especial para apelar (Brennan, Dawson y Toohey JJ), imputándose
nuevamente las costas al autor. El Tribunal sostuvo que el autor no podía
pretender daños ejemplares tanto tiempo después del juicio. El
autor afirma que la actividad dolosa de que se trata sólo se hizo del
conocimiento de la Comisión en 1990 y que desde entonces ha estado enfrascado
en prolongados procedimientos judiciales.
La denuncia
3. El autor sostiene que el Estado no ha cumplido con fiscalizar debidamente
el nivel y el ejercicio de la profesión médica en Chelmsford ni
con investigar una serie de quejas del personal de enfermería y de los
inspectores públicos. El autor denuncia también que los jueces
y abogados estaban predispuestos contra él y lo estigmatizaban sobre
la base de su tratamiento psiquiátrico, en particular en el juicio civil
de 1980 contra el Dr. Herron. Además, el autor dice que, según
parece, el Tribunal de Apelación de Nueva Gales del Sur ha desestimado
pruebas pertinentes, ha forjado hechos y pruebas y ha formulado juicios infundados
y erróneos tanto al suspender el procedimiento disciplinario en 1986
como la apelación sustantiva de 1996. El autor afirma que el Estado Parte
no ha dispuesto ni aplicado mecanismos regulatorios o de investigación
apropiados respecto del poder judicial y de los abogados. Los tribunales tampoco
le han otorgado una indemnización justa y adecuada en su calidad de víctima
del abuso y la tortura psicológicos señalados. El autor afirma
que éstos constituyen violaciones de los artículos 2, 14, 17,
18, 19 y 26 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
Cuestiones materiales y procesales de previo pronunciamiento
4.1. De conformidad con el artículo 87 de su reglamento, antes de examinar
las reclamaciones contenidas en la comunicación, el Comité de
Derechos Humanos debe decidir si ésta es o no admisible en virtud del
Protocolo Facultativo del Pacto.
4.2. Como el Protocolo Facultativo entró en vigor para Australia el 25
de diciembre de 1991, el Comité no puede ratione temporis tener en cuenta
denuncias relativas a acontecimientos ocurridos antes de esa fecha, salvo que
tuvieran efectos permanentes que en sí constituyeran una violación
del Pacto. Así, las denuncias del autor en relación con su tratamiento
en Chelmsford, el juicio civil contra el Dr. Herron y la decisión del
Tribunal de Apelación de Nueva Gales del Sur por la que se suspendió
el proceso disciplinario contra el Dr. Herron, que datan de antes del 25 de
diciembre de 1991, deben considerarse inadmisibles.
4.3. Por lo que respecta a las denuncias del autor en relación con las
decisiones del Tribunal de Apelación de Nueva Gales del Sur y el Tribunal
Supremo de Australia, el Comité recuerda que en general no incumbe al
Comité sino a los tribunales de los Estados Partes evaluar los hechos
y las pruebas en determinado caso, salvo que se determine que la evaluación
fue evidentemente arbitraria o equivalente a una denegación de justicia.
Además, no incumbe al Comité examinar la interpretación
de la legislación nacional por los tribunales nacionales. En el presente
caso el Comité observa que tanto el Tribunal de Apelación de Nueva
Gales del Sur como el Tribunal Supremo de Australia examinaron las denuncias
del autor y, sobre la base de las pruebas que tuvieron ante sí, se negaron
a alterar las conclusiones del tribunal a quo en cuanto a los hechos y la ley.
Las denuncias del autor y la información de que dispone el Comité
no confirman la conclusión de que las decisiones del Tribunal de Apelación
o del Tribunal Supremo fueron manifiestamente arbitrarias o equivalentes a una
denegación de justicia. En las circunstancias, esta parte de la comunicación
es inadmisible con arreglo al artículo 2 del Protocolo Facultativo.
4.4. En relación con las demás denuncias del autor, el Comité
considera que éste no las ha fundamentado para los fines de la admisibilidad.
Por lo tanto, también son inadmisibles con arreglo al artículo
2 del Protocolo Facultativo.
5. En consecuencia, el Comité decide:
a) Que la comunicación es inadmisible;
b) Que se comunique la presente decisión al autor y al Estado Parte para
su información.
__________
* Participaron en el examen de la presente comunicación los siguientes miembros del Comité: Sr. Nisuke Ando, Sr. Prafullachandra Natwarlal Bhagwati, Sra. Christine Chanet, Lord Colville, Sra. Pilar Gaitán de Pombo, Sr. Louis Henkin, Sr. Eckart Klein, Sr. David Kretzmer, Sr. Martin Scheinin, Sr. Hipólito Solari Yrigoyen, Sr. Roman Wieruszewsky, Sr. Maxwell Yalden y Sr. Abdallah Zakhia. De conformidad con el artículo 85 del reglamento del Comité, la Sra. Elizabeth Evatt no participó en el examen del caso.
[Hecho en español, francés e inglés, siendo la inglesa
la versión original. Posteriormente se traducirá al árabe,
al chino y al ruso, como parte del Informe Anual del Comité a la Asamblea
General.]